Debieron haberse amontonado mientras dormía
Bloqueado mi puerta y ventana
/Aunque sabes que me gustaría tener ventana/
Hicieron guardia como soldaditos de madera
Con sus caritas rojas igual que sus ojitos
Podía escucharles mientras dormía
Urdiendo planes para asfixiarme al amanecer
Afortunadamente sus manitos de madera
Lamentan el frio de los arboles
Mientras yo soñaba con bosques en llamas
Enteros de viajes que nunca pude hacer
Colocaban silenciosos las cuerdas de sus trampas
Sus propias trampas hechas cuerdas
Guillotinas, barricadas, fosforitos suicidas
/no les importaba perder a sus hermanitos/
Esperaban como siempre
Con sus cuerpecitos de madera y caritas rojas
Amotinándose sin remordimientos
Siempre mientras sueño bosques que se incendian
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